PREÁMBULO

Cuando en el siglo XVII,comenzó a configurarse la ciencia moderna en Europa,e incluso mientras se desarrollaba durante el XVIII,el científico profesional no existía como tal.Aquellos que investigaban las custiones científicas o simplemente se interesaban por ellas,eran los miembros instruídos de las clases altas, ya que era corriente durante aquellos siglos,que los más cultos tuvieran acceso a la mayor parte de la ciencia que se descubría y debatía por entonces.

  Fue en la mitad del siglo XIX,cuando se aceleraron los avances científicos y nacieron áreas totalmente nuevas de investigación,con las correspondientes disciplinas académicas;en consecuencia,el trabajo científico pasó a ser una carrera profesional y dejó de ser una afición.En las últimas décadas se ha sistido a una verdadera explosión del conocimiento,con cientos de nuevas materias cada vez más complejas,proyectos de investigación enormes y costosos y un ejército de científicos muy especializados.

 Hace mucho tiempo que el ciudadano corriente, ha quedado atrás en esta era compleja y plagada de nuevas ideas confusas,impenetrables e ininteligibles.
 Es de lamentar que los científicos hayan sido reacios a explicar la naturaleza de su trabajo altamente especializado y que hayan dudado en levantarse y dejar claro qur el progreso científico reciente ha beneficiado mucho a la humanidad.
 Un ejemplo de hasta qué punto afectan la confusión y desinformación sobre este tema,es que incluso la prensa más seria,es en numerosas ocasiones incapaz de distinguir entre bacterias y virus.

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